Los niños son como hojas en blanco que podemos rellenar con lo que queramos, por lo que es recomendable que nos aseguremos muy bien de las cosas que queremos que entren en sus pequeñas mentes, porque es muy posible que definan lo que serán cuando sean mayores. Por eso lo mejor es que procuremos ayudarles a realizar actividades que fomenten su creatividad y su imaginación, como la lectura o las manualidades.
Una de las principales ventajas de las manualidades es que los niños las pueden hacer desde muy pequeños, pues se pueden encontrar actividades adaptadas a todas las edades y dependiendo de las capacidades de cada uno es mejor que estas sean variadas, sobre todo porque los niños tienen una gran tendencia a perder el interés si lo que hacen es repetitivo.
Las manualidades son una magnífica forma de enseñar a los menores a trabajar en equipo, ser creativos e identificar los campos en los que tienen algún tipo de talento innato.
Pintar con los dedos o hacer figuras con plastilina son solo algunas de las manualidades que permiten a los niños liberar estrés y relajarse mientras aprende. Quizás alguno termine por convertirse en un gran artista que se gane la vida con sus obras.
Hay diversas maneras para entretener a los niños cuando se trata de manualidades, una de ellas es dándole una pelota de tenis para lanzarla a la pared. Se oye aburrido pero cuando se tiene pintura a la mano el objetivo cambia. Los materiales que se necesitan son: cinta adhesiva, un pliego de papel o cartón, una pared o cerca al aire libre, pintura de acuarela, recipientes poco profundos, pelotas de tenis viejas, guantes, manguera y toallas viejas. Ahora que tienes todos los materiales es hora de empezar a realizar las manualidades.
Pega el papel o el cartón con la cinta adhesiva sobre la pared que está al aire libre. Tienes que asegurarte de que no hay problema si se pinta la pared pero si lo hay protégela con un plástico. Después, llena los recipientes poco profundos con pintura de acuarela y colócalos en el suelo a una distancia para poder lanzar. Coloca las pelotas de tenis a lado y mete las manos de los niños en los guantes. Dile al niño que tome la pelota y la ruede en la pintura, después la tiene que lanzar hacia el papel que está pegado a la pared.
Utilizaran la misma pelota o varias al lanzarlas hacia la pared las cuales dejaran huellas sobre el papel creando un halo de colores. Al final enjuaga las pelotas con la manguera, sécalas con las toallas viejas y deja que escurran.
Una variación de esta manualidad es dejar caer la pelota desde una altura considerable sobre la pintura a lado de la pared para que al momento de salpicar deje una huella diferente o con un movimiento suave, diles a los niños que lancen la pelota con pintura sobre un papel pegado al suelo. La diversión está garantizada al realizar diversos lanzamientos variando la velocidad.