Mostraremos hoy una técnica con la que se puede crear un aspecto de tipo antiguo en la madera. Muy fácilmente le podemos dar a un mueble preferido ese aspecto especial que parece que fuera un regalo de la abuela.
Comenzaremos como muestra, y para ir practicando, a hacer este trabajo con un banco o silla de madera, que se adecue al estilo de la habitación donde lo vamos a ubicar. Pero este procedimiento lo podemos utilizar en cualquier mueble que nos guste cambiar.
Elegiremos dos tipos de pintura: uno para la parte de arriba y el otro para la base, la cual se verá luego en los sitios «desgastados».
Materiales:
Una silla o banco de madera.
2 o mas colores de pintura.
Base de pintura.
Una lija.
Un paño antiestático.
Cera.
Pincel.
Paño para cubrir.
Poliuretano.
La silla o banco que elegimos, si no está pintado anteriormente, lo debemos lijar y preparar pintándolo primero con el color base. Si estuviera pintado, limpiaremos primero con el paño antiestático y lo pintaremos con el color base. Lo dejaremos secar, cubriéndolo con cera sobre el color base procurando seguir el veteado, y a la vez procurando concentrar la pintura en los lugares de desgaste natural y en los bordes, para así lograr un aspecto más real.
Se procederá a pintar la capa superior y dejar que se seque bien. Si esta pieza fuera para usar en exteriores es conveniente usar pintura látex para exteriores, existe también látex para interiores, pero esta se deberá usar solo si la pieza estuviera bajo techo. Usando la indicada para cada ocasión se evitará que pierda el color.
Por último colocaremos la pieza sobre diarios y lijaremos con lija mediana sobre las partes que deberían tener un natural desgaste, hasta que obtengamos el efecto antiguo que deseamos.
Si queremos obtener un tercer color, debemos repetir el mismo proceso con cera, pintura y lija. Limpiamos la pieza con el paño antiestático y sellamos con dos capas de poliuretano.
Y ya tenemos para el asombro nuestros visitantes una pieza «antigua» que hemos mantenido hasta la actualidad.